Con el objetivo de generar espíritu de pertenencia e identificación con la Universidad, que permita reflejar valores como cooperación, solidaridad y compromiso.

Avanzar en el proceso que comprende no solo el conocimiento del Sello UCSC, sino también su apropiación en la vida concreta de las Facultades, Direcciones y Sedes de la Universidad es el propósito tras los encuentros sostenidos por el Comité Sello, los comités de Convivencia Laboral y las distintas reparticiones de la Casa de Estudios.

“Conocemos que nuestro sello identitario se caracteriza por: ‘La búsqueda de la verdad en el cultivo de los saberes con excelencia académica, mediante el diálogo fe y razón; teniendo como fundamento la antropología cristiana católica, velando por la dignidad de la persona humana, el bien común, la actuación ética y el compromiso social’, pero debemos avanzar en su operacionalización en la vida y trabajo de cada uno de los miembros de nuestra Comunidad, con el fin de generar una mística de ser UCSC y estar contentos de pertenecer a ella, identificándonos con ella”, explica el Presidente del Comité Sello, Patricio Merino.

Ya se han llevado a cabo más de 20 encuentros, en los que cada una de las unidades ha podido plantear los temas emergentes que surgen desde la propia comunidad, con el fin de visualizarqué de su vivencia está asociada al Sello Identitario“La idea es iniciar un trabajo de bajada del mismo, que abarque desde las relaciones personales hasta las diferentes áreas de la Universidad; sean éstas gestión, docencia, investigación y/o vinculación con el medio, todo con el fin de determinar qué nos diferencia de otras instituciones y qué incluye concretamente este estilo y perspectiva Sello UCSC”, aclara la Jefa de la Unidad de Desarrollo Organizacional, Cecilia Gutiérrez.

De igual modo, agrega que lo más importante de esta actividad es que constituye un trabajo realizado desde y para la unidad que lo ejecuta. “No es para el Comité Sello, sino para las mismas personas que lo trabajan”. Es por ello que se estableció que los encuentros fueran liderados por cada Decano y Director, acompañados además de los embajadores sello e integrantes de comités de Convivencia Laboral.

Sobre la importancia que tiene para la Universidad el que la Comunidad conozca y ponga en práctica su Sello Identitario, Patricio Merino afirma que este es lo que identifica, lo distintivo. “Es el ‘desde donde hacemos Universidad’. Lo que nos debe diferenciar y nace de nuestros documentos identitarios. Clarificada esta identidad se pueden establecer las posturas que se tiene con respecto a ciertos elementos como los valores que promueven, el enfoque, los énfasis, la gestión administrativa, entre otros.  El Sello UCSC nace de la antropología cristiana y pensamos que este es un bien para toda persona y la comunidad, por ello, lo ofrecemos a todos”.

Asimismo, señala que este fundamento antropológico implica considerar que la persona es creada a imagen y semejanza de Dios, que su vida es un don, que es amada en sí misma y que la persona está llamada a una plenitud-relacional con Dios a semejanza de Jesucristo: hijos en el Hijo.

Se espera que los encuentros permitan ver reflejados en el quehacer diario de la Comunidad Universitaria elementos y valores del Sello como el amor, cooperación, solidaridad, honestidad, honradez, franqueza, transparencia, humildad, sencillez, paz, respeto, responsabilidad, compromiso, perseverancia, determinación, espíritu de servicio y compromiso social.

“Ellos nos conducirán a la formación de personas que se distinguirán por su humanismo e integridad, constituyendo un real aporte a la sociedad actual y a la construcción de un proyecto de futuro compartido, donde caben las diferencias, complejidades y singularidades”, sostiene Cecilia Gutiérrez.

Hasta ahora, ambos profesionales se muestran satisfechos por la tarea realizada. “Esto, sin duda, nos genera desafíos como Comité Sello, sobre todo, en relación con cómo canalizar toda la riqueza que ha salido de las reflexiones y diálogos. El Sello busca hacerse vida y eso implica un trabajo común y permanente”, concluye Merino.

Fuente: Noticias UCSC.

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