En actividad organizada por el Observatorio de Estudios de la Sociedad de la UCSC.

Un encuentro que permitió el análisis de la migración de manera interdisciplinar fue el que llevó a cabo el Observatorio de Estudios de la Sociedad de la UCSC. La cita se inició con la exposición del académico de la Facultad de Estudios Teológicos y Filosofía, Arturo Bravo, quien compartió la visión bíblica de este fenómeno.

“El Antiguo Testamento no presenta una postura definida ante este tema. Se presentan dos corrientes, una de particularismo excluyente y otra universalista. Sin embargo, la balanza se inclina de forma bastante pronunciada a la vertiente de acercamiento hacia el extranjero, mientras aquello no ponga en peligro la identidad cultural y religiosa de Israel”.

Entre los argumentos para ello, según sostuvo Bravo, están la declarada autoconciencia del pueblo israelita de su origen migrante, así como la masiva corriente aperturista, a pesar de haber sido dominado históricamente por extranjeros.

Por su parte, José Antonio González, académico de la Universidad Católica del Norte, abordó la migración en esta zona del país, compartiendo el trabajo que esta institución ha realizado en conjunto con otras organizaciones, destacando las diferencias culturales entre las distintas nacionalidades al momento de abordar las problemáticas y acompañar al migrante.

En tanto, el fenómeno migratorio en el Chile reciente fue expuesto por el académico de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales de la Universidad, Marcos Calle, quien compartió parte de los resultados de las últimas encuestas sobre esta materia, llevadas a cabo entre 2017 y 2018. Es así como, hasta esa fecha, el número de inmigrantes en el país ascendía a 1.251.225 personas. Asimismo, la zona norte es la que concentraba el mayor número de población migrante, seguida por el centro y luego por el sur.

“Si abordamos el porcentaje de población migrante en relación con el total de habitantes, históricamente, Chile nunca alcanzó más del 1% respecto de la población total. En la actualidad, ya nos estamos acercando al 10%”. Otra característica de la migración que se vive hoy es la llegada de niños, niñas y adolescentes. Un dato relevante, afirmó el docente, porque debido al envejecimiento de su población, el país necesita gente joven que se eduque y sea fuerza laboral.

La actividad finalizó con la participación de Alfonso Vera, de la Casa del Migrante de Concepción. En su exposición, comentó que los migrantes llegan a Chile por ser un país sólido, estable, en el que pueden echar raíces y que en la Región del Bíobío existe la presencia de 36.000 ciudadanos extranjeros buscando nuevos horizontes.

De igual modo, sostuvo que dentro de las mayores dificultades que estos enfrentan están la ausencia de planes de intervención social y acompañamiento, malas prácticas laborales, desinformación, diferencias culturales, escasos recursos con los que llegan, falta de redes de apoyo para emprender, así como soledad y desarraigo, entre otras.

“La falta de oportunidades de trabajo y de previsión social hace que estén dispuestos a realizar cualquier labor que les ayude a sobrevivir. Toman trabajos sin contrato y con bajo sueldos, que no permiten satisfacer sus necesidades básicas, por lo que se dificulta la reunificación familiar”.

Fuente: Noticias UCSC.

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